Ya no se verán más carboneros en las montañas del País Vasco, si no es al objeto de tomarles fotografías. Este libro es buena prueba de ello.

Las fotografías del libro fueron tomadas en 2009, en el pueblo de Alkiza (Gipuzkoa), la mayoría de ellas junto al caserío Ikilisagasti. En el marco de un proyecto de la iniciativa Itxurain, Alkiza uztartzen (Itxurain, uniendo a Alkiza), en mayo se levantó una carbonera, que permaneció encendida y humeante durante una semana.

Aunque hay todavía en nuestros pueblos carboneros competentes, capaces de levantar una carbonera, darle fuego, y mantenerla viva durante varios días, la fabricación de carbón vegetal, al igual que muchas otras profesiones, figurará en la lista de empleos perdidos en el siglo XX en los libros de historia. Con estas imágenes nos gustaría evitar que esas actividades --y, de alguna manera, ese modo de vida-- fueran olvidados por completo.